Hola a todos,
Ya en la recta final de nuestra reuniones, nos encontramos el pasado 10 de mayo para compartir, una vez más, nuestra lectura. En este caso, la de la obra del japonés Haruki MURAKAMI Tokio Blues (Norwegian Wood). Antes de inciar nuestro diálogo sobre esta novela distribuimos el libro que protagonizará la última sesión de este ‘curso’, Momentos estelares de la humanidad del escritor austríaco Stefan ZWEIG, acompañándolo de una ficha de evaluación de la actividad que os pedimos meditéis y rellenéis para entregarla el próximo día de reunión, el 31 de mayo. Asimismo, tratamos de la cena conjunta con el resto de grupos del Club de Lectura de la Biblioteca.
En cuanto a Tokio Blues, ya había sido leída con anterioridad por tres de los miembros de nuestro grupo que nos sugieren otras obras del mismo autor como Kafka en la orilla o De qué hablo cuando hablo de correr y que, a la vez, realizan un sentido elogio de la relectura. La obra ha gustado: se lee bien, engancha y describe cosas muy sencillas con gran sensibilidad. Nos habla de los sentimientos de una forma que nos hace sentir que vivimos con los protagonistas. Los diálogos son vivos, fluidos… y el resultado es que los personajes nos llegan muchísimo. Personajes que, como señala uno de nosotros, “si se caen, se parten” y que mantienen unas relaciones muy naturales y francas entre ellos.
Señalamos que esos mismos personajes pueden parecernos en ocasiones raros, algo que achacamos al hecho de que se trata de una cultura tan distinta a la nuestra como la japonesa. Nos llama también la atención cómo la obra refleja las costumbres cotidianas de la sociedad urbana y de sus gentes: paseos, comida, locales, vida estudiantil… Alguien dice que es el autor consigue algo poético en lo urbano.
Se trata, a la vez, de una historia trágica en la que el dolor y la angustia tienen un papel destacado. La vis cómica de Midori, su forma de afrontar la sexualidad y sus simpatía aportan
Nos preguntamos si siempre hay un Watanabe; una persona así, buena fuera de lo normal con el hombro siempre dispuesto para servir de apoyo. Se trata de una alguien que acepta a cada cual como es. Nos llaman la atención las escasas referencias a su familia y concluimos que, en su caso, las cuestiones familiares no aparecen porque no tiene problemas que le acucien a nivel emocional, a diferencia de personajes como Naoko, Midori o Reiko. Nagasawa, prácticamente su único amigo en la residencia de estudiantes, es precisamente su opuesto a pesar de que es su coincidencia en la lectura de El gran Gatsby la que establece entre ellos una relación de igualdad. Igualdad en la diferencia. También se hace evidente la contraposición entre Naoko y Midori.
Entre los temas más destacados: la juventud, el desequilibrio y la enfermedad mental y el suicidio. Alguien observa que más allá del famoso harakiri, la cultura japonesa lo contempla como una opción más: la muerte no es una consecuencia de la vida, está en ella.
Notamos la importancia de la música y de la literatura en la novela que contiene múltiples referencias a canciones y obras literarias. En el caso de la música se trata de una verdadera banda sonora de esos años, finales de los sesenta, y su importancia se evidencia ya en el título de la obra. También son numerosas las referencias a la cocina y los alimentos. Para algunos, la aparición de Reiko en Tokio al final de la novela es absolutamente innecesaria ya que no aporta nada nuevo y no acaba de cuadrar.
Entre las frases que destacamos:
Todos somos imperfectos; cuando abres tu corazón te curas
Lo que nos hace personas normales es saber que no lo somos. ¡Bendito sea!
En la sección ‘MIS LIBROS’:
- La mujer de verde, del islandés Arnaldur INDRIDASON
- Las obras y la figura del mexicano Jorge IBARGÜENGOITIA
- Cielos de barro, de Dulce CHACÓN
En nuestro apartado ‘PETICIONES DEL OYENTE’ incluiremos varias obra de Sandor MARAI, al que algunos asociamos con Stefan ZWEIG. Son:
- El último encuentro
- La mujer justa
- La herencia de Esther
En la sección ‘POEMA DE CIERRE’ leímos el poema Respuesta de José Hierro. Y con él nos despedimos hasta el 31 de mayo, fecha de la última de las sesiones de este curso que estará dedicada a esos Momentos estelares de la humanidad. Como siempre, recordaros que este blog está a vuestra disposición para cualquier aportación o comentario.
¡Hasta pronto!
