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Sesión 13. Club ÉBANO: “La muerte en Venecia” de Thomas Mann

El lunes 18 de mayo (11 h.), en la siguiente sesión del club, analizaremos la novela de Thomas Mann, La muerte en Venecia.

Thomas MannThomas Mann (Lübeck, 1875 – Kilchberg, 1955) Escritor alemán, Premio Nobel en 1929. Criado en Lübeck, a la muerte de su padre en 1893 siguió a su madre a Munich, donde trabajó como aprendiz en una compañía de seguros. Más tarde, aprovechando en parte las relaciones de su hermano Heinrich, colaboró con varias revistas, entre ellas Simplizissimus. De 1895 a 1897 estuvo en Italia, acompañando a su hermano Henrich. En 1933, aprovechando una gira de conferencias, y siguiendo el consejo de sus hijos, no volvió a Alemania, sino que se exilió primero en Sanary-sur-Mer, cerca de Marsella, y luego en Küsnacht, junto a Zurich. En esa época no se definió políticamente, se mantuvo apartado de los círculos de exiliados e incluso prometió al ministerio de Propaganda alemán, en 1933, abstenerse de manifestaciones políticas, pues no quería hacer peligrar la relación con sus lectores alemanes ni la edición de José y sus hermanos. Esta tetralogía, José y sus hermanos (1933-1943), es una recreación del relato bíblico pero sin ninguna pretensión de historicidad y refleja la evolución del pensamiento del autor desde el irracionalismo del período 1914-1918, pasando por la democracia burguesa de la década de 1920 y los planteamientos condicionadamente socialistas de la de 1930. En 1938 se trasladó a California, donde residió hasta el final de la Segunda Guerra Mundial. Desde allí dio una serie de charlas radiofónicas de propaganda para la BBC bajo el apelativo común de Deutsche Hörer (1940-1945, ¡Oyentes alemanes!) y diversas conferencias de orientación antifascista. En 1947 visitó Alemania y participó en la primera reunión de posguerra del PEN-Club en Zurich. En 1952, decepcionado por la situación en Estados Unidos a raíz de la muerte de Franklin D. Roosevelt, volvió a Europa y se estableció de nuevo en Suiza hasta su muerte. Muy reconocido por sus conciudadanos alemanes.

La producción literaria de Mann fue enorme y, de entre ella, merece destacarse cronológicamente Los Buddenbrook (1901), novela subtitulada “decadencia de una familia”, que narra precisamente el progresivo declive de una estirpe hanseática en el curso del siglo XIX, sobre el fondo de los procesos de cambio sociológico producidos en esa época. Escrita bajo la influencia del radicalismo cultural de Nietzsche, en sus páginas aparece la oposición entre mundo y arte, lo que será un tema recurrente en el autor. Tonio Kröger (1903), relato publicado conjuntamente con otros varios, es la biografía de un artista, temáticamente muy cercana a Los Buddenbrook, y, según confesión del propio Mann, la obra que afectivamente le era más próxima. La novela Alteza real (1909) se trata de una “comedia en forma novelesca”, narrada con simpática ironía. La muerte en Venecia (1913), sin duda la más acabada síntesis de la poética del autor, y una cumbre en el género de la novela breve, presenta a través de sus protagonistas, el músico moribundo y el joven Tadzio, una sutil relación dialécticta entre el apogeo de la belleza y la inevitable presencia de la muerte. En La montaña mágica (1924), vasta novela comenzada en 1912, que pretendía en un principio ser una especie de sátira de La muerte en Venecia, Hans Castorp, patricio alemán internado siete años en un sanatorio pulmonar internacional suizo, vive un proceso formativo: con la excusa de las varias conversaciones que se entrecruzan en ese mundo cerrado, Mann intercala una serie de ensayos sobre múltiples cuestiones y traza un cuadro minucioso de la sociedad europea anterior a la Primera Guerra Mundial. Novelas posteriores: Carlota en Weimar (1939) en la cual Mann regresa al mundo retratado por Goethe y Las confesiones del estafador Felix Krull (1954), que quedó inconclusa a la muerte del escritor, aunque iniciada cuando era un joven escritor, recuperó la ironía acerca de la naturaleza del ser humano que había caracterizado muchas de sus obras precedentes.

La muerte en Venecia, 1913, (Título original alemán: Der Tod in Venedig) es una novela corta publicada por el escritor alemán Thomas Mann en 1912. La acción de la novela se sitúa en el verano de 1911, en Venecia, ciudad que marcará el destino del famoso escritor Gustav Aschenbach con dos imágenes igualmente perturbadoras: la angelical belleza adolescente de Tadzio y una ciudad azotada por la epidemia de cólera, reflejo de su propia decadencia y soledad.

La muerte en Venecia está plagada de referencias simbólicas a la mitología y la Filosofía clásicas. Tadzio es comparado con Eros, claro: el dios del amor que, según Platón, alienta en los hombres el anhelo de belleza e inmortalidad. Pero también con Narciso, el enamorado de sí mismo. La suya se nos presenta como una belleza inocente pero lejana, tentadora pero imposible. Mediador entre una tierra corrompida (simbolizada por una Venecia enferma de cólera) y un ideal de perfección, Tadzio es un ángel. Como todo ángel, es portador de un mensaje de salvación, en este caso para Aschenbach.. Mientras la enfermedad se propaga a su alrededor y se ceba con su propio cuerpo, Aschenbach debe aprender a salvarse, aceptando su propia verdad y pactando con sus propios miedos. La asunción de su sombra y del mal (no sólo físico) que le carcome hace posible una reconciliación final. Ésta es la austera esperanza que nos ofrece Mann.

Es una obra que, debido a su complejo simbolismo, genera variadas interpretaciones. Baste referir, a modo de ejemplo, la significación de Venecia, la ciudad de las apariencias y las ilusiones románticas y, al mismo tiempo, una ciudad-despojo que puede considerarse un emblema de la decadencia que afecta al propio Aschenbach, el protagonista.

1 comentario

  1. Maribel

    Si queréis profundizar sobre la novela, podéis leer el artículo de Mario Vargas LLosa titulado, El llamado del abismo (publicado en El País, el 10/05/2002). Es muy interesante.

    Nos vemos el lunes próximo.
    Saludos

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